En la obra, se limitará a comprar mediante contratos de largo plazo la energía y potencia que necesiten las distribuidoras
SANTO DOMINGO. El presidente de la República, Luis Abinader, aseguró este lunes que, para la construcción del complejo termoeléctrico de Manzanillo, el Estado no invertirá un solo centavo de su presupuesto, ni se endeudará, como pasó con Punta Catalina, sino que se limitará a comprar mediante contratos de largo plazo la energía y potencia que necesiten las distribuidoras.
“Para que tengan una idea de la competitividad de este proyecto, las empresas distribuidoras de energía van a adquirir el kilovatio (KW) por hora producido por esta planta, a un precio un 15% más bajo que los comprados a Punta Catalina”, expresó.
El mandatario manifestó que, el proyecto de Manzanillo, no solo se trata de una obra energética, sino de un motor de desarrollo de la región con un nuevo puerto, cuya construcción será adjudicada en abril de este año para comenzar las obras en julio.
Destacó que, esta iniciativa pública ya ha impulsado la inversión privada local con inversiones como el Hotel Súper 8 by Wyndham Manzanillo ya inaugurado; un proyecto de astillero y una moderna terminal de contenedores, así como la construcción de otra planta privada de generacion a gas natural con su gasoducto y linea de transmisión por una inversión de US$585 millones de dólares.
“Todo esto demuestra el efecto multiplicador de una mínima inversión pública que está generando más de US$2,300 millones de inversión privada y que transformará la Bahía de Manzanillo y la provincia de Montecristi, e impulsará la actividad económica de otras demarcaciones del noroeste como Dajabón, Valverde y Santiago Rodríguez”, puntualizó.
Licitación de la obra
El proyecto energético de la Bahía de Manzanillo, fue sometido a licitación en marzo del 2021 por el presidente de la República, Luis Abinader.
El mandatario destacó que, esta licitación fue más grande y compleja que la de Punta Catalina y sin embargo se realizó en completa transparencia, sin denuncias ni impugnaciones de manera tal que empresas privadas que participaron y no ganaron hicieron un reconocimiento público al Comité de licitación por la conducción del proceso.
“Un resultado de ese proceso competitivo fue la obtención de precios de energía y potencia excepcionalmente competitivos en comparación a otros procesos similares en la historia local de ese mercado”, refirió.