Santo Domingo – El Gobierno dominicano anunció el Plan Nacional de Viviendas Familia Feliz, un ambicioso proyecto que busca ofrecer a todos los ciudadanos la oportunidad de obtener su primera vivienda a precios asequibles, de acuerdo sus ingresos.
Así lo explicó Camel Curi, viceministro de Proyectos de Inversión del Ministerio de la Presidencia, quien dijo que en el primer año de ejecución serán construidas 11 mil viviendas de manera simultánea en diversas localidades del país.
“Cada desarrollo incluirá los mobiliarios urbanos y la infraestructura para que sus residentes cuenten con todos los servicios esenciales para una vida digna, tales como escuelas, centros de atención primaria, parques, destacamentos policiales y áreas comerciales”, destacó Curi.
El impacto del plan se verá reflejado, no solo en la mejora continua de la calidad de vida de los adquisidores, sino que, también, los ciudadanos serán entes económicos formales dentro del sistema financiero nacional.
El programa cuenta con una inversión inicial de US$32 MM, de un total de US$200 MM, proyectados al concluir este cuatrienio y se estima que se generen cerca de 460,000 empleos en los 4 años.
“Este plan beneficiará no solo a las familias, sino también los sectores construcción, comercio y sector financiero”, expresó Curi.
Para ser beneficiario del proyecto, el ciudadano solo debe demostrar que no posee bienes inmuebles propios y que sus ingresos están acorde a la vivienda seleccionada, las cuales están segmentadas de acuerdo a los niveles salariales.
Las familias cuyos ingresos son menores a los RD$16,000, podrán optar por una vivienda subsidiada; las viviendas de interés prioritario se ofertarán a familias con ingresos menores a los RD$26,000, en tanto que las viviendas de interés social estarán disponibles a familias cuyos ingresos estén por debajo de los RD$48,000 y las viviendas de bajo costo podrán ser adquiridas por familias con ingresos de hasta RD$91,000.
Aunque es un proyecto al cual podrán acceder todos los ciudadanos, Curi enfatizó que se priorizarán las entregas de acuerdo al sector donde viven las personas en relación a donde se desarrollen los domicilios.
“Es injusto realizar un proyecto en determinado sector y que quienes lo ocupen residan en otras localidades”, manifestó.
Otras prioridades a tomar en cuenta son las precedencias establecidas a través del Ministerio de la Mujer, las mujeres que han sido víctimas de violencia domésticas, las familias con miembros que tengan condiciones especiales o discapacidad, vulnerabilidad y los acuerdos establecidos con los gremios o instituciones, cómo enfermeras y personal de salud.
Sobre este particular, el viceministro resaltó “esto es así porque sabemos que muchas comunidades tienen clínicas y hospitales cuyo personal vive retirado y no viven con las adecuaciones de lugar. Con esto les aseguramos un hogar y siguen integrados en sus labores”.
Acuerdos y aprobaciones
Este plan del gobierno ha sido minuciosamente elaborado. Desde su concepción cuenta con la asesoría del Banco Mundial, para garantizar eficiencia y eficacia respecto a los estándares de desarrollo.
De igual forma, la elaboración del proyecto contó con la aprobación de organismos de los sectores sociales, financieros y estatales, que fueron consensuados de forma que pudieran emitir sus recomendaciones basados en las necesidades de las personas.
Destacó que entre las organizaciones consultadas se encuentran Ciudad Alternativa, Habitat, la Asociación Dominicana de Constructores y Promotores de la Vivienda (Acoprovi), Asociación Dominicana de Bancos Comerciales, Liga Dominicana de Ahorros y Préstamos (Lidaapi), cooperativas, así como con las entidades financieras a nivel particular.
“Esto es un acuerdo tripartito, es decir que, cuando una persona decide entrar al proyecto firma un convenio con el Estado y una institución financiera”, acotó Curi.
Respecto a las condiciones, dijo que las garantías que se necesitan deben ser probadas respecto a la integridad familiar, ya que el Gobierno les está dando la oportunidad de cambiar su situación y mejorar su calidad de vida.
En ese sentido, Curi insistió que “si una familia tiene hijos en edad escolar, ese menor debe ir a la escuela. Si los hijos son mayores de edad, y no pertenecen al sistema laboral, obligatoriamente deben asistir alguna academia vocacional”.
El programa prevé ser de continuidad, a fin de responder con la demanda habitacional del país por tiempo indeterminado.